lunes, 16 de mayo de 2011

Riaza B-Pro Bike 2011 (IBP 137)

He de decir que no soy muy “pro” marchas, pero esta de Riaza la verdad es que me llamo la atención por todo, el entorno en el que se realiza, la distancia (85kms) y el desnivel (1700m). Nunca me había enfrentado a un recorrido de más de 65kms, por lo que estos 85kms me tenían un poco intranquilo, y sumado al desnivel hacía que me asaltaran bastantes dudas sobre como terminaría la marcha.
De izquierda a derecha: Ahigu, yo, Pedrorf
A las 8:30h estaba en Riaza, no os cuento el madrugón saliendo desde Las Rozas ya que os lo imagináis. Había quedado a las 9am en la ermita del Rasero con otros dos Canyon-eros, Pedrorf y Ahigu, para conocernos y charlar un rato. Al final con la charla y el encuentro posterior con los CantiBikers, llegamos a la salida a las 9:55h, y debíamos tener delante aproximadamente a 900 de los 1000 corredores que éramos. Primer gran error de la ruta.




Salida de la marcha

A las 10:04h arrancamos según mi GPS, inesperado protagonista de la ruta como os contaré más adelante, en ese inicio de la ruta fui charlando con Nacho (Cantibikers), bueno más que charlando riéndonos, porque el tío es un cachondo, muy bien tipo sin duda. La ruta comienza pasando por el centro de Riaza, para posteriormente sacarnos del pueblo por carretera N-110a por donde circularemos escasamente 500m.  Luego cogeremos un camino ancho que nos servirá para ir calentando hasta que lleguemos al camino de Riofrío de Riaza. Este tramo sencillo es de un poco más de 8kms, y es donde poco a poco aprovecho para ir pasando a gente, pero somos muchos, y la verdad es que no es tarea sencilla.

"parón" en el camino
Cuando llegamos al camino de Riofrío de Riaza el camino se hace más estrecho, en algún tramo hay que ir en fila de a uno, y llegamos al primer parón. Pie al suelo, “algún accidente” es lo primero que pensé ya que el terreno está mojado y somos muchos. Cuál fue mi asombro cuando vi que el parón era por “un charco” de unos 3 metros de largo, por detrás oí el grito de uno que decía “esto es Mountainbike, no pasa nada por mojarse” y las risas de unos cuantos, pero el caso es que el 99% de la gente se bajaba de la bici y sorteaba el charco subiéndose por un lateral del camino que estaba bastante empinado. Ví que había rodadas en la entrada del charco, por lo que los de delante habían pasado, así que lo atravesé y problema solucionado, para los que tengan curiosidad el charco no era especialmente profundo.
Pasado el momento “charco”, avanzamos un poco más y nuevo parón, pie a tierra, y a esperar cual es el problema ahora, visto que antes era un charco, podía esperarme cualquier cosa, y así fue, ahora era un puente. Es un puente que atraviesa el río Riaza, no hay ninguna dificultad o problema en el puente, excepto que la subida es en piedra y “estaba mojada”. Me metí por la izquierda y subí la piedra mojada mientras alguien me decía “que está mojada”, pasé el puente sin mayor problema y me quité otro pelotón de gente.
Pasado el puente comenzamos a subir, el terreno está mojado, y al poco aparecen las primeras piedras, y de la mano de las piedras, gente andado con la bici. Gente que tiene el bonito afán de caminar por la trazada de la bici, cosa que no entiendo, ¿qué más te da empujar la bici por fuera de la trazada?, de esta manera permites que alguien pueda seguir montado. Muchas zonas tocó hacerlas por fuera del trazado, y en algún caso con amago de caída, pero hubo una zona en la que tocó poner pie a tierra. Como os podéis imaginar, no era momento para fotos.
Terminada la zona de las piedras, seguimos por un sendero, parece que estamos un grupo con gente que llevamos un ritmo parecido y vamos a avanzando bien. Al finalizar este sendero en subida está un fotografo de la organización, así que aprovecho para "posar". Terminado este sendero en subida, giramos a la izquierda y cogemos una pista ancha en subida hacia La Ermita de Hontanares, pasaremos junto a un magnifico bosque de “robles melojos” cercano a la zona recreativa de la ermita. Dejando la ermita afrontamos otro kilómetro de subida hasta llegar al “Mirador de Peñas Llanas” a 1.440 metros de altitud donde nos espera el primer avituallamiento, kilómetro 19.

Sendero posterior a las piedras

Foto Organización - Punto 1
Nada más terminar el avituallamiento toca bajar, una bajada por sendero, que comienza con una curva a la derecha y una señal de “peligro”, entiendo que por el primer tramo que es el más empinado, mucha gente esta bajando andando, pero es lo suficientemente ancho para poder bajar montado, hay alguien que me grita “pero no ves la señal de peligro”, supongo que es alguno de los que se ha bajado de la bici, pero en ese momento tenía más preocupación en ver por donde bajaba que en saber quien había sido. Finalizada la parte más empinada, el sendero se estrecha y sólo es posible bajar de uno en uno, cuando me doy cuenta estoy detrás de pedrorf y su maillot de los “10000 del Soplao”, bajamos a buen ritmo, aunque con muchos frenazos, pero bien. Al finalizar el sendero y mirar el manillar veo que mi GPS ha decido quedarse en este paraje tan idílico, y me sale un “OS..AS mi GPS” y freno para echarme a un lado, el que viene justo detrás me dice “le he visto salir volando al inicio de la bajada”. No me da tiempo a decirle nada porque pasa rápidamente, pero me acuerdo de todo su árbol genealógico por no haberme dicho nada cuando lo vio caer, gracias majete, por si me lees.

Toca la operación “no sin mi GPS”, así que decido dar la vuelta y subir andando para buscar el GPS. La estrechez del sendero me obliga a ir andado por medio del campo, cuesta arriba y cargando con la bici, además de aguantar comentarios tipo “que el camino es al revés” o “¿te ha gustado la bajada y quieres repetirla?”, en fin esa “chispa” tan característica que tenemos en España. Entre el cabreo de perder el GPS, el esfuerzo de subir a pata, y ver que has perdido el grupo en el que ibas ya con un buen ritmo, la verdad es que no me planteo otra opción que no sea encontrar el GPS. Si después de parar y subir de nuevo, no encuentro el GPS creo que me corto las venas. Ante este escenario, mi GPS decidió aparecer, estaba apagado y lleno de polvo, lo que me hizo temer por “su vida”, pero lo encendí y volvió a la vida. Fué un momento muy emotivo después de todas las rutas que llevamos juntos.
Recuperado el GPS (segunda moraleja que saco de las marchas, lleva el GPS en el maillot para que te grabe la ruta y punto, te evitarás disgustos), volvemos a realizar la bajadita, dedicada a los "chisposos de antes" mientras calculo que he perdido más de 20min entre bajar dos veces y subir a pata, pero todo sea bienvenido al recuperar el GPS. Al finalizar la bajada llega un sendero muy estrecho en llano por un robledal, esta parte de la ruta me gustó especialmente, al terminarlo nos desvían a otro sendero por una zona de pizarras, un paraje espectacular. La verdad es que la variedad de terrenos y colores es alucinante, y tanto senderito es una pasada para una marcha de este tipo. Entre sendero y sendero pasamos por Martín Muñoz de Ayllón
Finalizado el sendero de pizarra salimos a un camino ancho en subida de unos 2 kilómetros, que nos llevará hacia Becerril, punto en el que bajaremos lo subido dirección Serracin para enfrentarnos a la subida más dura del día, la comprendida entre Serracin y el Muyo. Es una subida de más de 5kms con un desnivel medio del 7% y máximo del 12,5%. En esta subida nos encontramos el segundo avituallamiento del día, inicialmente estaba previsto en el Muyo, pero debieron decidir adelantarlo, y desde mi punto de vista con buen criterio.

Al terminar la subida en dirección a Muyo hemos pasado la parte más dura del recorrido, y llega la hora de bajar sin cadena, desde este punto tenemos casi 10kms de bajada por camino donde el límite lo pone el biker y su peso, con tramos de más de 50kms/h donde los kilómetros vuelan. La bajada finaliza poco después de pasar el pueblo del Negredo, km 42 de la ruta (44 según la organización).


Desde este punto, y los siguientes 20kms la ruta es un constante sube y baja, con más bajada que subida, lo que favorece que la media en estos próximos 20kms siga siendo alta. Seguimos por caminos anchos y atravesando pueblos, Madriguera, Villacorta, donde esta el tercer avituallamiento, Vavieja, Saldaña de Ayllón y Ribota, donde nos encontramos el cuarto y último avituallamiento antes de la meta. Hasta aquí hemos pasado por pueblos pintorescos de la zona de arquitectura roja, alguno de los pueblos negros, y por parajes que acompañan a estas arquitecturas, suelo de pizarra, de piedras ferruginosas y tierras arcillosas que dan esos contrastes de colores negros, rojos y marrones en cada zona, sin duda un paisaje muy particular y bello.

Como comentaba, en Ribota tenemos el último avituallamiento, desde aquí al final tenemos 15kms, de los cuales 12kms son en subida, y 3kms en bajada. El camino desde Ribota transcurre por un robledal sin grandes rampas, máxima del 6% y media del 3%, pero que no da descanso, se va agarrando a las piernas poco a poco y sólo la sensación de que queda poco te empuja a seguir encima de la bici. Empiezo a ver gente parada en los laterales estirando, alguno tumbado a la sombra, con calambres, y otros que suben a un ritmo lentísimo, sin una gota más de fuerza, pero no se bajan, chapeau!. En esta parte final del recorrido se empiezan a ver las mayores señales de cansancio. Los que seguimos a un ritmo más o menos bueno dado las circunstancias, vamos recogiendo “cadáveres” como dice uno del club MTB Ávila, creo que es la única broma que se hizo en estos últimos kilómetros, no había fuerza para más.


Al finalizar el camino salimos del robledal, salimos a la carretera SG-V-1111, en ese punto está el último de los colaboradores del camino, un 10 para ellos, que nos canta las posiciones en las que vamos, la 247 creo que me dice a mí, desde este punto tenemos una bajada por carretera de poco más de 1,5kms que nos deja a los pies de Riaza, y no digo mal lo de “a los pies de Riaza”, porque ahora nos toca subir a Riaza. Es una subida de 1km hasta meta con una pendiente máxima del 8,8% y media del 5,2% que a estas alturas de la carrera subes como el viento viendo que la meta está a pocos metros y que has terminado la marcha en 5h 31m 20seg según el track del GPS, creo que coincide con el crono de la organización en mi llegada a la meta.

Llegada a meta, Riaza
Al llegar a la meta, tenemos el último avituallamiento, nos dan el regalo de la inscripción y más “cosas” en una bolsa que pesa como un diablo, y que ya miraré en casa. Lo mejor, la explanada de césped que hay en la llegada a la meta (el Rasero), donde tumbarse un rato, reponer fuerzas, y dejar la bici. Al llegar a la meta me encuentro con Pedrorf y su hija, una chavala muy guapilla y grande para su edad, ¡como se nota la alimentación del norte!, me comenta que ha quedado el 77, creo recordar, (vaya puestazo, desde luego llega en forma a los 10000 del Soplao del próximo sábado) y en ese momento me acuerdo de mi pérdida del GPS cuando iba detrás del él, y la duda de donde habría llegado sin su extravío, pero eso como dice el dicho “ya nunca lo sabremos”.
Me quedo a esperar a los Cantibikers mientras descanso un rato, lo mejor la llega de Nacho y su “pensaba que ya nunca más os iba a ver”, y alguna frase más que no publicaré, como comentaba al inicio, un crack.

Finalmente, mi clasificación oficiosa es el puesto 227, con un tiempo de 5h 29' 08".
Como conclusiones de la ruta:
-  Ruta preciosa en lo relativo a paisajes, entorno y variedad de caminos. Sin duda una marcha para repetir, yo ya la tengo apuntada en el calendario.
- Es la última vez que arranco desde el final una marcha, no es cuestión de hacer mejores tiempos, es poder hacer la marcha encima de la bici.
- Si llevas GPS para grabar la ruta llévalo en el maillot, te graba igual la ruta, y te evitas pérdidas de tiempo y dinero (yo me salvé de milagro).
- La organización de la ruta muy bien, muy bien señalizada, bien los avituallamientos y gente muy amable.
Perfil de la ruta:

3 comentarios:

  1. Buena cronica, en foromtb te he dejado un pequeño consejo el cual yo hago cuando llevo el GPS en la bike para no perderlo
    Un Saludo

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  2. Me apuntaré la ruta para hacerla más adelante. La verdad es que es una prueba que tenía apuntada pero este sábado me espera " la gorda", el infierno cántabro de los 10.000 del soplao, y no era plan de tener algún percance. La dejo para el año que viene.

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  3. Hola Iván,
    pues ánimo tío y ya nos contarás, yo el Soplao la haré para el año que viene.

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